domingo, 18 de septiembre de 2011

Hay veces en la vida en las crees que sólo las personas que tienes delante tuya son las únicas que te pueden ayudar, pero al pensar eso, la mayoría de las veces, estamos equivocados. Todo en esta vida tiene un por qué, nada pasa en vano y todas las personas que entran en nuestra vida, nos marcarán de una forma u otra, significaran algo para nosotros y todas y cada una de ellas nos enseñarán algo, más o menos útil en esta vida, pero nos lo enseñarán.
Tú fuiste una de esas personas, me enseñaste, me guiaste en la confusión, me ayudaste a levantarme de mil y una caída, me enseñaste que nada grande viene fácilmente, me enseñaste a luchar. Tú eres mi rumbo y mi dirección. Día tras día me enseñas algo nuevo, ya estés a 100 o a 100000 kms de mí, pero lo haces. Puede ser el peor día de mi vida, pero si veo una de tus sonrisas, aunque sólo sea a través de una pantalla, todo lo malo desaparece.. Pero hay veces, hay momentos en los que siento que lo que más quiero se me escapa de las manos y no puedo hacer nada para evitarlo, en esos momentos, a través de una sonrisa, de una palabra, de un gesto.. me das esa fuerza que necesito para seguir adelante, de hecho, en este momento lo estás haciendo.. me ayudas a creer que este sueño puede cumplirse, me ayudas a sentir que casi puedo rozarlo con la punta de mis dedos, me ayudas a no darme por vencida.. Gracias, nadie más consigue hacer eso, sólo tú.

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